El día de ayer, me comunicaron sobre el fallecimiento de la abuela de unos de mis más grandes amigos de mi infancia, adolescencia y adultéz. Realmente el mundo que nos rodea y nosotros mismo cambiamos, con el paso del tiempo; todo gracias a vivir y experimentar distintas situaciones, buenas, malas, tristes, alegres... Todo eso va llenando nuestra vida, y brindándonos lecciones. Recuerdo una obra de Kundera, que decía que lamentablemente la vida es solo una, y que nos toca aprender , con base a la prueba y error.
Hay ocasiones, como este, donde nos aborda una nostalgía (a mi en lo personal), tanto por lo que fue como por lo que nunca sucedió. Me detengo un instante y recuerdo el aroma de todas esas niñas, infantiles musas de mis infantiles intentos de poesía, o el recuerdo de los caramelos que mi abuelo nos compraba, o del sabor de la comida calienta que mi abuela nos daba los domingos... o de las burlas crueles de mis compañeros de colegio por mi sobrepeso, o las bromas crueles que hacía a mis compañeros en el bachillerato, o más cerca aún mis tarde bohemias en la universidad, hablando de todo sin mayor preocupación que tener un cigarrillo...
Con lo anterior, podríamos caer , fácilmente, en la trampa de sentir que la vida es cruel o injusta. ... pero vamos la vida no es cruel, simplemente es como es... Nacemos, vivimos, recordamos, morimos y en algunos casos somos recordados.
En lo personal, he vivido momentos muy duros, perder casi todo y perder todo, pero en medio de tantas lagrimas, he encontrado un poco de humildad, lo que me ayuda a vivir aceptando las cosas tal como son y cambiar aquellas que puedo hacer....
Y hoy procuro vivir con la esperanza de un nuevo día...
No negaré, que por momentos me derrumbo, pero de ahí saco fuerzas para continuar...
Mama Pía, RIP....
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